17 de marzo de 2014 - Cristina, tras el encuentro con el Papa: "Muchos se sacan la foto, pero no lo escuchan"

La presidente Cristina de Kirchner fue recibida durante más de dos horas por el papa Francisco en el Vaticano, donde hablaron sobre "la paz en el mundo" y el Sumo Pontífice hizo "una apelación muy fuerte a mantener la unión entre los pueblos de América del Sur". La jefa de Estado dio esos detalles de la larga audiencia que mantuvo con Francisco en la residencia de Santa Marta, que incluyó un almuerzo. Cristina llegó al encuentro con una bota ortopédica ya que, según ella misma explicó, se esguinzó el tobillo izquierdo anoche en el HOTEL Edén donde se hospeda. Además, le llevó regalos al Papa: un termo, cuatro libros, una pintura y un portarretrato. La reunión se concretó a poco de que Jorge Bergoglio cumpliera su primer aniversario como máxima autoridad de la Iglesia católica, y se trató del tercer encuentro entre ambos en ese período, luego de que el Santo Padre la recibiera en el Vaticano a sólo días de haber sumido y de otro breve encuentro que mantuvieron durante la visita que hizo Francisco a Brasil en julio pasado por las Jornadas de la Juventud. En declaraciones a la prensa en Roma, la mandataria sostuvo que el Papa pidió que la región tenga como "objetivo fundamental" mantenerse "unida, solidaria y hablando permanentemente entre todos". "No solo me lo pidió, sino que es su deseo. Tienen que estar juntos, unidos no separarse, dijo. Es una cuestión que lo desvela, lo preocupa y lo digo públicamente porque le pedí autoriza para transmitirlo", señaló Cristina. Al ser consultada sobre si hablaron del narcotráfico y la inseguridad, respondió que no, pero destacó que Francisco vincula ese flagelo a la "exclusión social", tal como se desprende del libro que él le regaló. "Muchos deberían no solamente sacarse una foto, sino leerlo", advirtió la mandataria, quien añadió: "Al Papa lo desvela la no estigmatización de los jóvenes frente a estos hechos. El capitalismo financiero es una de las causales de una economía de exclusión que debe ser revertido". "Se habló en general de que toda la región se mantenga unida, solidaria y hablando permanentemente entre todos nosotros", insistió Cristina Kirchner, quien señaló que no hizo referencia especifica a la situación de inestabilidad que vive Venezuela. Sobre si se abordó puntualmente la situación del gobierno de Nicolás Maduro, agregó: "No corresponde que lo hiciera. Fue una apelación muy fuerte a mantener la unión entre los pueblos de América del Sur y el diálogo permanente entre todos nosotros". También habló sobre que percepción se llevó de Francisco comparado con el primer encuentro que tuvieron hace un año: "Lo veo muy bien. Lo vi muy bien la primera vez y lo veo muy bien ahora, con un mayor grado de organización, como le pasa a cualquier jefe de Estado que recién llega a su gobierno. Ha tomado decisiones notorias que son de público conocimiento. Lo vi muy tranquilo, muy seguro", detalló. Al ser consultada sobre si conversaron de la inminente audiencia que Francisco mantendrá con el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, advirtió que "es absolutamente impropio que comente conmigo lo que va a hacer con otro jefe de Estado". Luego, otra periodista le preguntó a la mandataria sobre esa versión que asegura que Francisco les dice a sus visitantes argentinos que "cuiden a Cristina", sobre lo que contestó en tono humorístico. "Por lo pronto, me atendieron muy bien. Comimos de entrada verduras italianas, que son espectaculares, con aceite de oliva y sal, luego verduras al vapor con costilla de carne, y de postre frutas. Yo lo convidé con mate cocido", describió entre risas. Antes de recibir a la mandataria, Francisco envió una "bendición especial para los argentinos" a través de los periodistas que esperaban la llegada del papa y de la Presidenta, a quienes además saludó uno por uno y con particular cariño. El objetivo de la visita de Cristina Kirchner a Francisco fue ofrecerle al Santo Padre "los mejores deseos y sentimientos de afecto del pueblo argentino en ocasión del primer año de su pontificado", informó oficialmente El Vaticano. Tras el encuentro, la mandataria partió hacia París, donde el miércoles se reunirá con su par Francois Hollande, con quien mantendrá un almuerzo en el Palacio del Elíseo, en el marco de la invitación especial de la Argentina a la presente jornada del Salón del Libro que se realiza en la capital de ese país. La presidente Cristina de Kirchner se reunió durante dos horas y media con el papa Francisco en la residencia de Santa Marta, en el Vaticano, en lo que fue el tercer encuentro entre ambos desde que Jorge Bergoglio fue designado como sumo pontífice. Cristina y el Papa compartieron un almuerzo durante más de dos horas, en el que comieron verduras y costillas de cerdo, de postre frutas, y además la mandataria tomó un matecocido, según ella misma contó. Tras el encuentro, Cristina y la comitiva se dirigió a Ciampino, para viajar hacia Francia, donde la Presidente se reunirá con su par Francois Hollande e inaugurará el Salón del Libro de París. La mandataria arribó a suelo galo minutos después de las 15. Antes de emprender el viaje, Cristina brindó una conferencia de prensa en la que reveló los detalles de su conversación con Francisco y exhortó a "escuchar más" al sumo pontífice. Cristina aseguró que el Papa "hizo una apelación muy fuerte a mantener la unión entre los pueblos de América del Sur" y criticó a los que "van a sacarse una foto, pero después no lo escuchan". Además, dijo que con el Papa dialogaron sobre "la paz en el mundo y un tema que lo preocupa y lo desvela, que es la falta de trabajo en el sector de la juventud". La mandataria sostuvo que el Papa pidió que la región tenga como "objetivo fundamental" mantenerse "unida, solidaria y hablando permanentemente entre todos". "No solo me lo pidió, sino que es su deseo. 'Tienen que estar juntos, unidos no separarse', dijo. Es una cuestión que lo desvela, lo preocupa y lo digo públicamente porque le pedí autoriza para transmitirlo", señaló Cristina. En tanto, la Presidente contó que no hablaron de temas vinculados con la política doméstica, como por ejemplo la situación del narcotráfico, pero destacó que coincidieron en la necesidad de trabajar en la inclusión social como forma de combatir la inseguridad. En cuanto a la economía, Cristina dijo que el Papa cuestionó el "capitalismo financiero" -una "distorsión del capitalismo", según las palabras de la Presidente- y abogó por "una ley de quiebras" para el mundo. Al respecto, la jefa de Estado remarcó que la Argentina es el país "que más ha pagado" en concepto de deuda y lanzó una fuerte crítica contra los fondos buitre. "Estamos sometidos a un porcentaje mínimo, menos del 3%, de gente que obtuvo los bonos a un precio irrisorio y que pretende condicionar al resto", se quejó. El secretario de Culto, Guillermo Oliveri, destacó la buena relación y el excelente clima entre el papa Francisco y Cristina, al finalizar el encuentro mantenido por ambos este mediodía en el Vaticano. En ese sentido, Oliveri -quien participó de la actividad- resaltó que, en todos los encuentros, siempre sobresalió "el buen humor de ambos", al señalar que se trata de "dos personas que se aprecian mutuamente y que pueden dialogar". En ese sentido, indicó que el clima de cordialidad y entendimiento "tiene que ver poco con lo que muestran los medios". Poco después, en diálogo con Radio Nacional, Olivieri aseguró: "Tienen buen diálogo. El encuentro tiene que ver con un llamado de la Presidente y una inmediata respuesta del Papa para fijar la fecha del almuerzo". Agregó que ambos "son líderes que tienen una mirada común respecto de determinadas situaciones que pasan en nuestra región y también en el mundo. Sobre todo ese objetivo de la búsqueda de la paz a través del diálogo y el consenso".