21 de noviembre de 2013 - En los momentos de sufrimiento, la oración del por qué es más útil

«En el momento de la prueba, nos preguntamos por qué suceden estas cosas, y no se puede explicar», dijo Papa Francisco esta tarde durante el encuentro, en la Basílica de San Pedro, con la comunidad filipina de Roma. «En estos momentos de sufrimiento, no se cansen de preguntarse por qué, así llamarán la ternura del Padre». El arzobispo de Manila, el cardenal Luis Tagle, presente durante el encuentro, se conmovió al recordar el dolor provocado por el tifón Haiyan, por lo que el Papa inmediatamente tomó la palabra. Francisco ofreció una meditación de algunos minutos sobre cómo afrontar el sufrimiento que acarrean eventos como el tifón que causó muerte y devastación en Filipinas. El encuentro (que había sido programado para llevar a cabo la bendición de un mosaico con la figura de San Pedro Calungsod, catequista filipino mártir del siglo XVII y canonizado por Papa Ratzinger el 21 de octubre de 2012) se centró en el sufrimiento que está afrontando la población de las islas filipinas. «Por qué suceden estas cosas, no se puede explicar –prosiguió Francisco–, hay tantas cosas que no se pueden entender»; «cuando los niños comienzan a crecer, no entienden y hacen muchas preguntas a los papás y a las mamás; los psicólogos la llaman la edad del por qué, ni siquiera esperan las respuestas y siguen preguntando por qué. El niño necesita, en esa su inseguridad de la mirada y del amor de su padre y de su madre, de los ojos y de los corazones de sus padres». «En estos momentos de sufrimiento –exhortó el Pontífice–, no se cansen de preguntar por qué, así atraerán la ternura del papá y su mirada sobre tí, como hace el niño cuando pregunta “por qué”». «En estos momentos de sufrimiento», subrayó el Papa, «la oración del por qué es más útil», y «yo los acompaño con la oración del por qué».