19 de diciembre de 2013 - El papa Francisco vendría al país recién en 2016

En los 30-40 minutos que estuvieron ayer por la mañana con el Papa para entregarle la copa, los directivos de San Lorenzo tuvieron tiempo de hablar de temas que fueron mucho más allá del fútbol. Así, en la rueda de prensa que tuvo lugar en la Casina Pío IV, sede de la Pontificia Academia de Ciencias, en el Vaticano, cuando lLA NACION preguntó si durante la charla se había hablado del tema que más les importa a los argentinos, es decir, cuándo Francisco viajará al país, volvió a confirmarse que para eso habrá que esperar. "El Papa nos dijo que antes de 2016 no va a viajar a la Argentina", dijo Marcelo Tinelli, vicepresidente de San Lorenzo. Matías Lammens, presidente del club, fue más allá y explicó que el Papa está pensando en viajar a su tierra en 2016 por dos motivos puntuales: ese año se celebra el Bicentenario de la Declaración de la Independencia (9 de julio de 1816) y, por otra parte, tendrá lugar en la ciudad de Tucumán el Congreso Eucarístico Nacional. El arzobispo de Tucumán, monseñor Alfredo Horacio Zecca, había enviado una carta al papa Francisco para invitarlo formalmente al encuentro. La invitación formal fue cursada por Peregrinaciones Arquidiocesanas, una entidad creada por Zecca, ex rector de la Universidad Católica Argentina (UCA), mientras Jorge Bergoglio era arzobispo en Buenos Aires. La revelación de Tinelli en verdad no fue una novedad. De hecho, el Papa mismo había dicho el 26 de octubre pasado que antes de 2016 no viajaría a su amado país, al recibir en audiencia a un grupo de ex alumnos de jesuitas de Uruguay. "No sé cuándo está planeado ir allá, antes del 16 no, seguro. Pero lo que sí es seguro es que si visito la Argentina, tengo que visitar Chile y Uruguay, los tres juntos. Así que estaremos allí", había dicho el Pontífice. En realidad, ya a fines de julio pasado, en la inédita conferencia de prensa que hizo en el avión que lo llevó de Río de Janeiro de regreso a Roma, el Pontífice había dicho que no sabía cuándo iba a viajar a su madre patria. Y había explicado que, sobre todo después de haber viajado a Brasil para la Jornada Mundial de la Juventud, tenía otros continentes que atender. "En América latina creo que no hay posibilidad de volver, porque el papa latinoamericano, que acaba de hacer el primer viaje a Latinoamérica Arrivederci! Debemos esperar un poco", había afirmado, en su habitual estilo directo. En esa misma oportunidad había explicado que había fuertes posibilidades de un viaje a Tierra Santa el año próximo para celebrar el 50° aniversario del encuentro entre Atenágoras y Pablo VI en Jerusalén, junto con el patriarca de Constantinopla, Bartolomeo, jefe de la Iglesia ortodoxa. De hecho, aunque no está confirmado, se espera que el viaje a Israel y a la Autoridad Nacional Palestina se realice en una fecha cercana al 25 de mayo próximo. Su amigo, el rabino Abraham Skorka, en una entrevista con LA NACION había revelado que ambos sueñan con ir juntos a rezar al Muro de los Lamentos -el lugar más sagrado para los judíos, en Jerusalén-, así como a Belén, en los territorios palestinos, donde se cree que nació Jesús, para dar un mensaje de paz al mundo. Más allá de este viaje a Tierra Santa, el Papa tiene planeado viajar a Asia. Se habla de posibles viajes a Sri Lanka, Filipinas y Vietnam. Además, un destino será seguramente algún país de África y, en 2015, Estados Unidos. Después de ser elegido para ocupar el trono de Pedro, el 13 de marzo, había comenzado a circular una versión de que el Papa viajaría al país en diciembre de este año, después de su reunión con la Presidenta en el Vaticano. El Gobierno había dejado trascender su interés de que el Papa visitara la Argentina en diciembre, luego de las elecciones de octubre, por celebrarse ese mes el Día de la Virgen -el 8 de diciembre- y por la fecha de cumpleaños de Francisco, que, como es sabido, cumplió 77 años anteayer. Pese a la inmensa expectativa, a fines de abril, el padre Federico Lombardi, vocero de la Santa Sede, desestimó esa versión. Y ahora habrá que esperar hasta 2016.